Meet Jorge Ávila, Director Creativo de FIID
¿Cómo el diseño me abrió la puerta del chef?



Llevo siete años en la industria de la publicidad, y pensé que ya había visto de todo: marcas de consumo masivo, campañas de moda, spots de coches que jamás podré pagar… Pero nada me preparó para lo que descubrí al llegar a FIID: el universo de la hospitalidad.
Aquí, el diseño no solo vende. Te hace salivar. Te transporta. Te da hambre, te da sed y, a veces —si todo sale bien—, te lleva directo a hacer una reserva.
Trabajar con restaurantes, bares y hoteles cambió por completo mi manera de diseñar. Antes buscaba “verse bien”; ahora busco “saborear bien”. ¿Qué textura tiene este platillo? ¿A qué huele esta terraza? ¿Cómo suena este cóctel cuando lo sirven? La inspiración ya no viene solo de un buen brief, sino del crujido perfecto de una tostada de atún o de una luz cálida que cae justo sobre una mesa para dos.
En FIID entendí que el diseño tiene un poder brutal cuando conecta con los sentidos. Que un menú puede ser una obra de arte. Que una buena identidad gráfica puede tener el mismo efecto que un sorbo de vino: hacer que todo tenga más sentido.
Y sí, el diseño me abrió la puerta del chef —literalmente—. Porque ahora paso tanto tiempo en cocinas, terrazas y barras, que a veces pienso que mi siguiente skill será preparar un buen risotto. Pero por ahora, me quedo con la magia de traducir sabores en branding, emociones en estrategia y experiencias en campañas que dan de qué hablar.
Así que, si te preguntas cómo el diseño me llevó hasta la cocina, la respuesta es simple: porque aquí, los creativos también tenemos que saber maridar conceptos, emplatar ideas y servir experiencias que se queden en la memoria.
Acá te dejo una probadita de mis proyectos favoritos.
Buen provecho.






CONOCE AL AUTOR
Jorge Avila
Director Creativo FIID
Llevo siete años en la industria de la publicidad, y pensé que ya había visto de todo: marcas de consumo masivo, campañas de moda, spots de coches que jamás podré pagar… Pero nada me preparó para lo que descubrí al llegar a FIID: el universo de la hospitalidad.